En el mundo existen personas que son maniáticas de la limpieza y el orden. Muéveles un libro de lugar y de seguro demoraran 5 segundos en volver a ponerlo en la posición exacta en la que estaba. Por otro lado, están las personas huracanes; basta con que estén un rato en un lugar y el desorden se instala acabando con todo lo que hay a su paso. Te dejamos un listado de 20 señales que indican que deberías ser más ordenado:
1) Se te pierden las cosas (¡Muy seguido!)
2) Siempre dices que no tienes tiempo para ordenar (cualquier cosa te parece más tentadora que ordenar)
3)Y cuando lo tienes no ordenas ni por casualidad
4)O si lo haces, el orden te dura 5 minutos (con suerte)
5) Te demoras mucho en buscar la ropa que te vas a poner porque no la encuentras (desaparece mágicamente justo lo que necesitas)
6) Se te pierden las zapatillas
7) O un calcetín (o los dos)
8) Nunca sabes dónde dejas el cargador del celular (lo empiezas a buscar cuando te queda 5% de batería)
9) Constantemente se te pierde la billetera (cartera o mochila)
10) También el pase o la tarjeta Bip para ir a clases
11) Tus cuadernos o apuntes desaparecen mágicamente debajo de tu cama
12) Ya no tienes suelo en tu pieza (ni espacio)
13) Acumulas cosas en tu velador (ya casi no lo puedes usar)
14)Te acuerdas a última hora de la prueba o de los trabajos
15) O de que tenías que llevar materiales
16) Puedes encontrar muchos platos y vasos en tu pieza (un set completo, más muchos tenedores y alguna cuchara)
17) Encuentras cosas que se te había olvidado que tenías
18) Al abrir tu clóset tienes peligro de morir aplastado por una avalancha de cosas
19) Te cuesta distinguir que ropa está limpia y cuál está sucia (debes aplicar tu olfato para descubrirlo)
20) Tu familia siempre te dice que ordenes un poco (tu pieza o la casa)
Si te identificas con varias de estas 20 señales significa que deberías ser más ordenado con tu vida y tus cosas. Pero para que vamos a ser mentirosos, todos tenemos nuestros defectos y ser desordenado es parte de nuestro ser más interior. A veces un poco de desorden a nadie le hace mal. Solo hay que aprender a controlar este para que pase lo más discreto posible fuera de la casa.