5 mitos y verdades sobre los preuniversitarios

Con la PSU amenazando el fin de año, muchos optan por los siempre prácticos preuniversitarios para reforzar esos conocimientos que pueden estar un poco débiles o que, simplemente, cuesta comprender.

Pero alrededor de instituciones como el Pedro de Valdivia o el siempre presente Cepech, se forman ciertos mitos que espero poder derribar para ustedes.

Mitos:

1. El preuniversitario es necesario. Esto va a depender de cada uno. No va a faltar el compañero seco al que le va bacán en clases y en todos los ensayos y no va a tener necesidad (suertudos aquellos); y va a depender del enfoque que le haya dado tu colegio a la PSU y sus contenidos.

2. Preuniversitario es sólo para carreras que demandan puntajes demasiado altos. No necesariamente; muchas universidades ofrecen descuentos en los aranceles si sacas buen puntaje, de modo que no es mala idea hacer un extra esfuerzo a ver si rinde frutos.

3. Los preuniversitarios son todos carísimos. Muchos ofrecen descuentos si te inscribes por el año entero o haces el intensivo, y también si pagas al contado o por adelantado; además, si eventualmente te va a llevar a un mejor educación, deberías verlo como una inversión.

4. Sólo sirven si haces un intensivo. Al revés; lo más probable es que sea más efectivo y más a largo plazo si empiezas en tercero medio y haces los facsímiles y el estudio parte de tu rutina.

5. Sólo sirven si los contratas para todas las pruebas. Va a servir siempre y cuando te concentres en las áreas que tengas más débiles o aquellas en las que necesites un mejor puntaje para la carrera que quieres.

Verdades:

1. No son necesarios pero ayudan mucho. Siempre se puede seguir mejorando, sobre todo si tu NEM no es el mejor.

2. ¿Qué tiene de malo necesitar ayuda en algunas áreas?. Aún si no entras a lo que querías, todo lo que aprendas te servirá de base para el año siguiente.

3. Existe una amplia variedad. La oferta de preuniversitarios sigue creciendo, y siempre podrás encontrar el que más te acomode.

4. Sirven si es que realmente te comprometes. Siempre que te dediques a realizar los facsímiles y resolver todas tus dudas, valdrá la pena estudiar en un preuniversitario.

5. Va a funcionar si pones énfasis en lo que necesitas. Cada persona es diferente, de modo que fíjate en los porcentajes que tiene cada prueba para lo que quieras estudiar y enfócate en eso.

¡Mucha suerte y vamos que quedan meses para prepararse!