Todos los años son noticia cuando se publican los puntajes nacionales de la PSU, los alumnos del Instituto Nacional se destacan por sus éxitos académicos, pero también porque comparten una manera particular de ver la vida y es que sin duda los que hemos conocido a alguno damos fe de esa forma singular en que estos loquillos se desenvuelven.
He aquí un listado de cosas que sólo entenderán los que tienen o han tenido a algún amigo del Instituto Nacional:
1. Siempre se encuentran con gente que conocen.
En un colegio de 4 mil alumnos se conoce a muuucha gente, no sólo los compañeros sino también sus nexos, así es que no es raro que se encuentren en el lugar menos pensado con la amiga del primo de un compañero.
2. No soportan perder ni equivocarse.
Sabemos que los forman para ser competitivos, pero chicos, no siempre se puede ganar, acéptenlo!
3. Lealtad a prueba de balas.
Más de alguna vez lo han demostrado, son leales, les inculcan este valor y se convierten en nuestro “perros”, el mejor amigo que podríamos necesitar.
4. Crean elaborados planes para sus conquistas.
Como pasan mucho tiempo entre hombres, teorizan sobre conquistas y galanterías, que muchas veces queda sólo en el intento por timidez, es que no están acostumbrados a relacionarse con mujeres.
5. Opinión política.
Formados para ser los líderes del mañana, no pierden ocasión para mostrar su opinión sobre actualidad y es que son parte de un colegio con tradición política.
6. Son aperrados.
Están tan acostumbrados a la infraestructura “emblemática”, así es que no se hacen problema y se acomodan en cualquier parte.
7. Tienen muy claro el horario de salida de los liceos de niñas.
Es común que encontremos a alguno bien peinadito afuera del liceo 1, 7 o Carmela, esperando a alguna chiquilla para “conversar”.
8. Son buenos para los sobrenombres.
Hay gente ocurrente y un institutano y es que parece que son puntaje nacional también a la hora de poner apodos. Sólo hace falta que alguien tenga algo extraño en su apariencia para que fluya la imaginación.
9. Parecen más arrogantes de lo que son.
La primera impresión no siempre es la valida y eso pasa mucho con los institutanos porque cargan con el estigma de ser del colegio más importante, pero al conocerlos demuestran su sencillez y calidez.
10. Cuentan anécdotas de las visitas al refugio El Tabo.
Dicen que lo que pasa en el refugio se queda en el refugio, pero más de alguno latea con las anécdotas de sus viajes a El Tabo mientras suspira con nostalgia.
11. Les gusta debatir.
Buenos para discutir, hacen valer sus ideas aunque sea de puras cosas ñoñas como el mejor personaje de Star Wars o el solo más vistoso de una banda.
12. Llaman a sus amigos por su apellido.
Es común escucharlos nombrar a sus amigos por sus apellidos y no por sus nombres de pila, parecen del ejército con su modo tan duro al llamarse.
13. Se sienten orgullosos de su Liceo.
Será por la antigüedad de la institución o por la cantidad de personalidades que han egresado del Nacional, no lo sabremos, pero de lo que sí nos podemos dar cuenta fácilmente es de los identificados que se sienten con su colegio y el cariño que le tienen. De hecho no es raro ver alguno que ya ha salido hace varios años y anda con su polera o poleron desteñido con la insignia del Instituto.