Cuando eliges pololear con una chica, es probable que te guste por muchas razones. Pero si además tiende a ser lo que llamamos "matea", es muy probable que te pasen cosas que no ocurrirían con otro tipo de niña:
1. Tal vez crean que sólo estás con ella para que te ayude a estudiar.
Sobre todo si tu promedio no es lo que digamos "bueno".
2. Que probablemente para ti es un plus, pero no es SÓLO por eso.
¿Qué tiene de malo que te ayude de vez en cuándo?
3. Si te va bien, van a creer que es todo gracias a ella.
¡Aunque te hayas matado estudiando!
4. Te acostumbras a estudiar con ella.
Y de hecho a estudiar de verdad.
5. Pero también a tener "recreos" de estudio interesantes.
Si es que entiendes lo que digo.
6. Tiendes a sentarte con ella en los ramos en los que más puede ayudarte.
Ya sea para que te explique lo que no entiendes o poder copiar sus ordenadísimos apuntes.
7. Y aguantar que te digan que eres un macabeo.
Pero es un precio que estás dispuesto a pagar.
8. Tus papás seguramente amarán que tenga buenas notas.
Y, por extensión, es probable que quieran mucho a tu polola (¡imagínate si no!)
9. Pero tú conocerás su lado oscuro.
(Porque todas las mujeres tenemos uno)
10. Es muy probable que adoptes algunos de sus hábitos de estudio.
Y tal vez te sigan incluso más allá de los años de estudiante.
11. ¡Y veas buenos resultados!
Porque estudiar y tener un método ¡sí sirve!
12. Te sentirás raro cuando no estudies con ella.
Por ejemplo ramos que no tienen juntos.
13. Pero la apreciarás cuando vuelvan a su rutina de a dos.
Y vuelvan a tener sus interesantes recreos.
14. Básicamente, es probable que seas MUY feliz.
Tienes una chica que te gusta mucho y que además puede enseñarte un par de cosas... la vida es buena.