A veces uno va en la micro y sin querer escucha lo que conversa otra gente... de eso se trata esta historia.
Se subieron 4 locos a la micro, 3 hombres y una mina pelirroja. Hablaban entre ellos así que obviamente eran compañeros, los chicos empezaron a gritar conversando, de cosas del colegio: pruebas, el profe culi**, anotaciones, etc. Pero después se pusieron a comentar un video que uno de ellos vio en internet, una porno. Se trataba de una china que la “violaban” en la calle, según ellos se notaba que era falso, porque estaba muy preparado. El loco empezó a detallar como el violador tocaba a la asiática y los compañeros decían: “ohhh, que cuático”, “la hueá bacán” o “el hueón maestro”.
Obviamente la chica iba bastante incómoda, su cara se mimetizaba con el color de su pelo y miraba de reojo a los demás pasajeros que estaban con una cara de WTF. Incluso, la niña empezó a buscar sus audífonos para desentenderse de sus compañeros…Era obvio que sentía vergüenza ajena. Sin embargo uno de ellos, le dirigió la palabra y le hizo una pregunta “super piola”: “Yo creo que a las minas, igual les gusta que las violen. Se hacen las hueonas no má’, ¿o no?”. La chica que estaba roja de vergüenza y de molestia, se paró y grito: “¡PAREN DE HABLAR HUEÁS, CABROS IMBÉCILES!”. Se dio media vuelta, tocó el timbre para que la micro parará y se bajó.
Lo chistoso es que en vez de preguntarse qué le pasó, o de tratarla de loca, los chicos se quedaron calladitos durante gran parte del viaje, ya que toda la gente que iba, los empezó a mirar. Supongo que la chica les devolvió la mano, en cuanto a que ellos sintieran vergüenza y por eso no emitían sonidos.
Si es así, esa pequeña colorina la supo hacer. Bien por ella (Y).
¿Les ha pasado algo similar?
Imagen CC vía mariordo59