Una de las grandes preguntas que debe hacerse todo director de colegio y alcalde responsable de un establecimiento, es como enfrentar la toma de un recinto. Tras el amago de incendio, los ánimos se calentaron por parte de las autoridades responsables del Instituto Nacional, principalmente por el grave peligro que corrieron los alumnos en un evento que afortunadamente no tuvo mayores consecuencias que el daño a una bodega.
En Providencia, la situación es bastante distinta. Desde que la alcaldesa Josefa Errázuriz asumió, tras imponerse al entonces edil, Cristián Labbé, la postura y la forma de enfrentar las movilizaciones ha cambiado completamente. Si cuando el "coronel" era la máxima autoridad en la comuna, las fuertes disputas entre él y los estudiantes eran pan de cada día, desde que asumió la administración el 2012, la alcaldesa ha buscado llegar a un acuerdo con el alumnado, así lo recuerda el entonces secretario general del Centro de Alumnos del Liceo Lastarria, Esteban Paredes: “Ella vino a la toma para tratar de defender su postura y de hecho llegamos a un acuerdo y en el colegio la medida no se implementó del todo. La municipalidad cedió”, señala Paredes, haciendo alusión a cuando Josefa Errázuruiz decidió junto a su equipo cambiar el sistema de admisión, lo que generó reparos de parte de los alumnos de los colegios emblemáticos de la comuna, entre ellos los del propio Liceo José Victorino Lastarria, que se tomaron el recinto.
Durante lo que va del año ningún colegio de Providencia ha estado en toma ni ha manifestado intenciones de estarlo. Según Esteban esto se debe a "la tendencia que se ha logrado gracias a la estrategia de la alcaldesa que no es para nada represiva”.
Fuente: La Tercera/ Imagen CC The Santiago Times