Cerca del 20% de universidades no cuentan con acreditación por parte de la Comisión Nacional de Acreditación (CNA), un porcentaje importante teniendo en cuenta que se sometieron al proceso voluntariamente. Mientras que en el total de centros de formación técnica e institutos profesionales, la certificación no supera el 50%. ¿Qué pasará con quienes se incorporen a dichas instituciones?
Según la CNA, el organismo externo encargado de promover la calidad de universidades, institutos profesionales, y centros de formación técnica, los planteles que no lograron acreditación por parte de esta comisión no pueden garantizar el cumplimiento del proyecto de la institución, ni su buen funcionamiento, mucho menos una educación de calidad global para los estudiantes. Puntos como la infraestructura, docencia, y estados financieros son revisados.
Es un procedimiento que puede dejar a aquellos estudiantes que se incorporen a instituciones no certificadas, con el impedimento de ingresar con beneficios que otorgue el Estado, ya sean becas o créditos. Asunto fundamental para solventar los costos actuales de una carrera.
La acreditación es una instancia para validarse ante el estudiantado y la oportunidad de demostrar una enseñanza que alcance estándares mínimos de funcionamiento. Los resultados de la CNA pueden ser una buena vara para decidir el ingreso a una universidad. Sus rangos de acreditación van entre uno a siete años, y por supuesto, mientras más años, mejor sustentada la institución.
Cabe destacar que aún hay decenas de instituciones de educación superior que no han optado por certificarse, mientras que el tiempo restante de planteles acreditados puede variar de acuerdo a la fecha en que iniciaron su proceso, por ende, es necesario informarse desde la CNA, con datos actualizados, y así evitar cualquier incertidumbre.
Además, se debe recalcar que existe una fase de acreditación para la institución y otro para las carreras. Una carrera puede acreditarse independiente de que su institución no lo esté, y viceversa.
Procura fijarte bien en la institución que te interese, te darás cuenta que no es tan complejo conocer los parámetros que se reconocen en tu futura universidad, CFT, o IP. De ti depende no terminar avalando planteles que no otorguen una base de seguridad al estudiante y a su futuro campo laboral.