Se acerca fin de año y con ello, para muchos, el final de todo un ciclo de 12 años: el colegio. Es por eso que en algunos establecimientos, además de todas las ceremonias, polerones y protocolos oficiales, editan un anuario escolar, en donde al final permiten incluir las semblanzas de cada alumno de cuarto medio. ¿Cómo lograr que las de tu curso se conviertan en un buen recuerdo para el futuro?
Formato: primero es importante definir algún tipo de formato, para que todos puedan tener las mismas cosas y que no se vean desiguales. Aunque en algunos anuarios todo esto ya está definido, si la decisión es del curso pueden pensar en distintos asuntos como qué tipo de foto pondrán, cuántos puntos tendrá y qué cosas no pueden faltar.
Encargados: es recomendable que sean tus propios amigos los que te escriban la semblanza. Además es bueno que exista un encargado de recopilarlas todas y revisarlas. Idealmente alguien que se lleve bien con las letras.
Revisión: no te olvides de revisar tu semblanza varias veces. No solamente para evitar que salga con errores, sino también para que no se preste para malos entendidos. Recuerda que generalmente lo revisan algunos profesores, así que evita poner algo que sabes que van a terminar editando. Hay formas sutiles de decir esas anécdotas comprometedoras que le dan un toque memorable a la historia de cada uno.
Extensión: puede ser un detalle, pero no lo es. Es importante conocer con certeza cuánto espacio van a poder ocupar por cada compañero. Si escriben poco sobre alguien, luego quedará un espacio vacío, mientras otros lo tienen lleno. Por otro lado, si se extendieron demasiado escribiendo una semblanza, después podría terminar acortada en el proceso de diseño.
Extras: -Las fotos de niño nunca faltan. Otra opción más original son las caricaturas, especialmente cuando algún compañero tiene un talento especial con el dibujo.
- Además de las semblanza de cada uno, puede ser entretenido incluir una del profesor jefe además una sobre “el grupo curso” como conjunto.