Seguramente tus papás te han dicho que no estés pendiente del celular todo el tiempo o que no lo ocupes en la mesa mientras están almorzando, y te molesta. Pero también es muy desagradable cuando estás conversando con tus amigos y ellos están viendo el celular a cada rato y no te ponen atención. Según algunos especialistas, este es un problema llamado Phubbing y aquí te explicamos qué es y cómo puedes combatirlo. El Phubbing es el hábito de estar constantemente pendiente de tu celular y no del resto de cosas que pasan a tu alrededor, sobre todo cuando estás con otra gente. Se ha catalogado como un problema social y puede manifestarse tanto en hombres como mujeres de todas las edades, ya que cualquier persona que tenga un teléfono móvil puede ser víctima de esta mala práctica.
Tal ha sido la magnitud del phubbing que hasta han surgido movimientos para contrarrestarlo como “Stop Phubbing”, una iniciativa del autraliano Alex Haigh, quien ideó un sitio web para crear conciencia entre los phubbers de lo desagradable que puede ser dicha costumbre, y cómo puede convertirse en una obsesión.
“Muchos de nosotros lo experimentamos con frecuencia, las personas prestan más atención a sus teléfonos que a ti, es un problema mundial que requiere ser discutido antes de que empeore”, advirtió el joven australiano de 23 años.
Phubbing resulta ser la combinación de las palabras en inglés phone (teléfono) y snubbing (menospreciar). El sitio web explica que la idea no es crear una guerra contra la tecnología, sino que sentarse a evaluar la forma en que nos comportamos frente al otro cuando tenemos un celular.
La campaña ha ido ganando terreno a nivel mundial, al punto de generar titulares en diarios como The Guardian. “Esto ganó una amplia exposición, no esperábamos este nivel de interés. Es mucho mejor tener una conversación en el mundo real que disfrutar de la fría compañía de un objeto inanimado”, añadió Haigh.
En el sitio web establece que el 87% de los adolescentes prefiere el contacto vía texto que cara a cara, y que los restaurantes experimentan alrededor de 36 casos de phubbing cada noche. Además, pone a Santiago en el 19° lugar de todas las ciudades del mundo con 1.261.000 personas adictas al celular y muestra un video en que explica el problema y la campaña.
Un ejemplo para combatir este fenónemo que proponen los expertos es que, cuando un grupo de amigos o familiares vaya a almorzar o a cenar a un restaurante, todos dejen sus celulares fuera de la mesa y el primero que no pueda aguantar toda la comida sin revisar su teléfono, debe pagar la cuenta. Así podrán estar libres y desconectados por un rato y compartir entre ellos.
Y tú, ¿eres phubber o prefieres disfrutar una conversación cara a cara?