La red social de Mark Zuckerberg cuenta con casi mil millones de usuarios, y para muchos se ha convertido en un elemento esencial en sus vidas. Facebook se ha transformado en una especie de biblia y agenda electrónica para una gran parte de la masa cibernética, donde todo lo que les rodea, todo lo que hacen, debe estar en la red social, si no es así, es como si no existiera o no hubiese ocurrido. Algunos especialistas han estudiado el tema y concluyen que realmente existen adictos al servicio. ¿Cómo saber si eres uno de ellos? Aquí te dejamos algunas de sus características.
Lo primero al levantarse, lo último antes de dormir
No alcanzas a tomar el primer café de la mañana y ya estás revisando tu perfil, o en el otro extremo, no puedes poner un pie dentro de la cama porque, quien sabe, algo interesante podría aparecer de un momento a otro.
¿Muchas notificaciones? Alegría; ¿Ninguna notificación? Depresión
La cantidad de notificaciones que aparecen al momento de abrir tu cuenta afectan directamente a tu estado de ánimo. Independiente de que sean 20 sugerencias a FarmVille, necesitas ver que hay un grupo de personas que todavía se acuerda de ti.
¿Tu casa se está quemando? Hay que publicarlo
Están asaltando a una persona frente a ti, presenciaste un choque con heridos, el tipo de al frente no se ha dado cuenta que lleva abierta su mochila, un niño camina solo por en medio de una calle llena de vehículos... Si publicas todo este tipo de cosas sin antes preocuparte por ayudar, deberías revisar tus prioridades. Y bueno, después divúlgalo. Al fin y al cabo puede ser una buena anécdota.
Evento o nunca fue
Para juntarte con tus amigos a un cumpleaños, un aniversario, un partido de fútbol, o simplemente conversar y compartir un rato, bastaba con avisarse con un poco de anticipación o a través de una llamada. Si para ti no es suficiente y necesitas que exista un evento que te lo recuerde, una simple agenda no es mala opción.
Andas, pololeas, peleaste, terminaste: Todo el mundo debe enterarse
Modificas tu estado civil cada vez que se produce un cambio en este, por muy leve que sea. Una pequeña discusión puede transformarse en el fin de la relación, o cuando recién comienzas a conocer a alguien, desaparece tu soltería. En ambos casos es muy probable que asustes a la otra persona y realmente termines quebrado.
Es inconcebible que alguien no tenga Facebook
Estás conversando con un amigo y terminas diciéndole, “nos ponemos de acuerdo más tarde por Facebook”, a lo que este te responde “no tengo”. Tu cara se desfigura y pretendes que no escuchaste lo que te acaba de decir. Acéptalo, hay gente que no tiene una cuenta y sigue viviendo.
Te están contando algo de lo que ya te enteraste
Obviamente no eres el único adicto aquí. Hay otras personas que igual tienen la necesidad de contar todo lo que hacen. Pero es peor aún que te pases horas leyéndolos. Tanto así que ya no hay necesidad de conversar en persona, total, lo que te van a decir ya lo sabes.
Te gusta todo
Cada vez que alguien cambia su foto de perfil, modifica su estado, hace un check-in, sube una imagen divertida, logra un puntaje alto en un juego, publica un video, te gusta, te gusta, te gusta y te gusta. ¿Será necesario?
No dejarás de jugar hasta ser el número uno
Todas las semanas aparece un juego nuevo que está de moda: FarmVille, Diamond Dash, Words With Friends, The Sims Social, Bejeweled Blitz, Texas HoldEm Poker, son solo algunos en una larga lista. Lo único que tienes claro es que no importa cuánto tiempo tome, debes lograr el primer lugar en tu lista de amigos.
Llegaste a esta lista por Facebook
Tenías varias otras formas de poder haber leído esta serie de factores que indican una adicción a la red social, pero lo hiciste por la misma descrita. ¿No será hora de que desconectes un rato el computador y apagues el celular? Hay un mundo afuera para vivir, mucho más interesante que enterarte de la vida de otras personas.
¿Con cuantas opciones del listado te sentiste identificado?
10 razones para saber si eres adicto a Facebook
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Secundarios