A quien no le ha pasado que estando muy preparado para una disertación o exposición, los nervios o a ansiedad te juegan una pésima jugada y te sale pésimo, disminuyendo considerablemente tu nota y demostrándole al profesor que no sirvió de mucho haber estudiado horas y horas para que te saliera tal y como tú lo deseabas.
Esta es una situación que provoca mucho malestar en una gran cantidad de estudiantes de nuestro país, de hecho, 7 de cada 10 escolares dicen ponerse nervioso antes de pararse adelante de su curso y expresar los contenidos de su exposición.
Existen muchas formulas para evitar o calmar tus nervios, y aquí te entregamos algunas para que te luzcas adelante de tus compañeros y profesor:
- Lo peor que puedes hacer es aprenderte tu disertación completamente de memoria, ya que el miedo a olvidar alguna palabra contribuye en gran medida al aumento de tus nervios. Tampoco te aconsejamos que acudas cien por ciento a la improvisación. Lo mejor que puedes hacer es saber el orden en el que vas a decir las cosas, y como ayuda, en un papel anota palabras claves que te hagan recordar lo que debes decir a continuación.
-Otra de las técnicas que siempre recomiendan es la de mirar un punto fijo en la sala, pero tampoco creemos que sea la más conveniente, ya que pone en evidencia tus nervios y eso te pondrá aún más ansioso. Lo mejor que puedes hacer, es tratar de mirar a las personas cuando hablas, ya que eso te hará sentirte mucho más seguro contigo mismo y lo reflejará también, en el sentido de expresar el interés que tienes de que te pongan atención. Si haces lo primero, lo más probable es que la audiencia empiece a mirar a otros lados o a conversar, desconcentrándote aún más.
-Te aconsejamos utilizar un power point, pero “ojo”: no con textos gigantes para leer, sino que con pequeñas frases o mapas conceptuales que te ayuden a explicar más facilmente tu disertación.
Si sigues estos pequeños consejitos, te aseguramos una mejor concentración a la hora de expresarte frente a tu curso, y tu profesor y tu libro de notas, sin duda lo gradecerán.
¿Cómo manejar los nervios en las disertaciones?
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Secundarios