Hater: dícese de la persona que le encanta ser odiado, y por eso odia todo lo que a los demás les pueda resultar entretenido o interesante. Sicológicamente son descritos como “cínicos hostiles”, pero a través de las redes sociales se les ha denominado “hater”, por su principal cualidad de odiar todo. Con esta actitud buscan notoriedad, necesitan atención, por eso resaltan los errores de otras personas sin razón aparente.
¿Tienes algún compañero hater que te tiene harto criticando y odiando todo lo que haces o dices? Aquí te traemos los 7 consejos para vivir con uno cerca y no morir en el intento.
1. “Tu envidia aumenta mi ego”: así no más. Si alguien se da el tiempo de fijarse en ti y criticarte, eso significa que eres lo suficientemente importante como para que la gente opine sobre tu vida. Si alguien comienza a criticar todo lo que haces o dices siéntete bien. Ya eres parte de un grupo de gente importante. ¡Gracias haters!
2. Todo hater es un ser vulnerable: ¿realmente serían capaces de decirte las cosas a la cara o sólo lo hacen entre cuchicheos y por redes sociales, protegidos por una pantalla de computador? Cuando te das cuenta de esto, toda la “amenaza hater” se cae. Haz la prueba un día y enfréntalos. Ya te darás cuenta de que no son capaces de decirte las cosas a la cara. ¡Deja que te resbale toda esa basura! Como dicen, perro que ladra no muerde…
3. Los haters no te odian: lo que de verdad odian es que se sienten incapaces de llegar hasta donde tú has llegado y están muy frustrados. Entonces se odian a sí mismos. ¡Así es! Pobrecitos ¿no? Por eso es mejor amar a tus haters… ¡son tus mejores fans!
4. Pongámonos serios, es un problema sicológico: Como dijimos al principio, los haters son definidos desde la sicología como “cínicos hostiles”; son desconfiados y despectivos, siempre listos para agredirte sin razón y provocarte una gran molestia. Es porque necesitan atención. Tú tranquilo o tranquila siempre. No te rebajes a pelear con una persona que puede tener problemas serios.
5. Imagínate cuántos haters tienen los famosos: Miley Cyrus, Lady Gaga y Justin Bieber han seguido sus exitosas carreras llenas de lujo y dinero por montones a pesar de tener miles de haters en todo el mundo. Si lo piensas bien, gracias a estos “odiadores” es que siempre son temas de conversación, y como son comentarios inofensivos no les interesa. Entonces, ¿por qué te tendría que importar a ti? Como dicen en el mundo de la farándula, “no importa que hablen mal de ti, lo importante es que hablen”.
6. Prefiero que me odien por quien soy a que me amen por quien no soy: ¿cierto? Yo sé que hay gente que me odia, pero también sé que no me interesa. Hay mucha más gente que me quiere por lo que soy y esos son los más importante para mí. No pienso gastar energías en un personaje que habla de mí si no me perjudica en nada. ¡Esa es la actitud!
7. “Haters gonna hate”: los odiosos odiadores siempre van a ser así, a menos que venga una luz divina y haga cambiar a ese compañero hater un momento a otro, y sabes que eso no va a pasar. Imagínate que son tantos que ahora se odian entre sí. Déjalos ser felices. Como dice Paul McCartney “vive y deja morir”.
Imagen CC Unknowntryhard1