Según un documento presentado por el municipio de Santiago, los destrozos en el Liceo de Aplicación durante las tomas que se llevaron a cabo el primer semestre, estarían avaluados en 300 millones de pesos.
Frente a esta situación, y a los millonarios gastos en los que ha tenido que incurrir el Municipio de Santiago para reparar el establecimiento, el concejal de Renovación Nacional, Felipe Alessandri, decidió llevar sus quejas hasta la Contraloría, de manera que sea la entidad fiscalizadora la que realice una investigación para encontrar a los responsables.
En el escrito presentado ante el organismo el pasado 13 de agosto, Alessandri culpa a la directora de Educación de la comuna, María Luisa Rivera y a la propia alcaldesa, Carolina Tohá, de ser las culpables de esto: “El resultado del actuar de la directora de Educación, respaldado por la alcaldesa (...) en su actitud de avalar y permitir las tomas, ha causado al erario municipal un detrimento cercano a $ 400 millones, en solo un semestre”.
En su defensa, la máxima autoridad comunal dijo que “esta administración, y especialmente la directora Rivera, han sido categóricos: no se avala esta forma de movilización y se privilegia el diálogo como forma de enfrentarla”, rechazando así la petición del concejal de destituir a la directora de su cargo.
Fuente: La Tercera/ Imagen CC Paula Slachevsky