Comienza cuarto medio y con esto la preocupación por rendir una buena PSU. Muchos buscan ensayos en Internet, otros repasan la materia de los años anteriores y otros buscan un preuniversitario para preparar la famosa prueba.
Pero elegir un preuniversitario no es cosa fácil y son muchos los factores que hay que tener en cuenta al momento de elegir el indicado. De nada sirve gastar cientos de miles de pesos en uno, si no tenemos la real intensión de prepararnos. Así que a continuación te presentamos un par de tips que te pueden ayudar a elegir el preu ideal de acuerdo a tus capacidades.
(Además puedes ver acá algunos tips para preparar la PSU sin asistir a un preuniversitario).
1. No te guíes por la cantidad de puntajes nacionales que tienen los preuniversitarios.
No sirve de nada que un preu tenga 100 puntajes nacionales si el resto de sus estudiantes tienen 400 puntos. Es por esto que te recomendamos no guiarte por los puntajes nacionales y en vez de eso, trata de conseguir el promedio PSU de todos los estudiantes del preuniversitario. Aunque esta información cuesta bastante encontrarla, así que tendrás que preguntar en los mismos preu o ver si en los sitios web de cada uno aparece.
2. No existe una relación costo/calidad comprobada.
Siempre pensamos que si el preuniversitario es más caro o tiene más prestigio, será mejor y obtendremos mejores resultados en la PSU. Pero hay que tener siempre presente que no sacamos nada con pagar un millón de pesos en un preu, si no vamos a “pescar” las clases o si nos dará flojera hacer los ejercicios.Existen preuniversitarios ligados al Crush que poseen material oficial del DEMRE (aquí encontrarás ese material oficial) y que en algunos casos son gratuitos. Considera esas opciones y no porque sean más baratos, significa que son malos. Es mejor ver con qué material trabajan y quienes son los profesores.
3. Elegir un preu que quede cerca de tu casa o de tu colegio.
Pensarás que esto es un capricho de flojo, pero aunque no lo creas, la flojera es un factor importante contra el cual debemos lidiar al enfrentar la PSU. Si el preu te queda lejos, te dará flojera ir todos los días, perderás más tiempo en viajes y te cansarás el doble. Así que privilegia algo que sea cercano a tu casa o si tu colegio tiene un preuniversitario, evalúa esa opción.
Además trata de ir a un preuniversitario con alguien que conozcas, para que te motives a ir y para que puedas practicar y preguntarle cosas que no hayas entendido. Pero ojo, tienes que tratar de no dedicarte a conversar en clases o a “hacer la cimarra” juntos. Al final con eso lo único que logras es engañarte a ti mismo.
4. Tomar sólo los ramos que te sean más importantes o en los que necesites mejor puntaje.
Muchas personas piensan que por llegar a cuarto medio, necesitan hacer preu en todos los ramos para que les vaya bien en todo. Pero como dice el sabio dicho “el que mucho abarca, poco aprieta” y si vas a tener clases de cuanta materia pasen en la PSU, colapsarás y terminarás rindiendo poco en todas. Es mejor enfocarte en aquello en que estés más débil o en lo que sientas que necesitas potenciarte para obtener un buen puntaje en eso.
Daniel Sáez por ejemplo, pasó a cuarto medio en el Colegio Hispano Chileno y dice que lo más terrible es pensar que al llegar al preu se dé cuenta que no le han pasado ni la mitad de la materia que entra en la prueba. Y justamente por eso decidirá tomar solamente Lenguaje y Matemática, mientras que los otros ramos los preparará por su cuenta, para no colapsar con la presión de saberlo todo, en todos los ramos.
5. No tomes ningún preu si no aceptas el compromiso de dedicarte constantemente y de tener una actitud positiva a aprender.
Típico, les mentimos a nuestros padres diciendo que nos esforzaremos y que iremos a preuniversitario, que haremos todos los ejercicios y ensayos que pueda haber en el mundo y sacaremos triple puntaje nacional. Pero para qué nos vamos a mentir a nosotros mismos. Hay cosas que no transamos y lo más importante es darnos cuenta de lo que estamos dispuestos a entregar para que nos vaya bien. Y no va tan solo en estresarse estudiando (aquí un par de tips para no estresarte), eso tampoco sirve, sino que hay que tener una actitud positiva frente al aprendizaje y al crecimiento personal. La PSU no es de vida o muerte, pero si lo será la actitud que tengas frente a esta nueva etapa de tu vida. Así que, a ponerle empeño para poder cumplir tus sueños.
Y recuerda, los preuniversitarios no hacen milagros, pero tú sí.