Eso por lo menos es lo que arrojó el resultado de la prueba Simce de 2do básico que dio a conocer el Ministerio de Educación hace unos días. Ahora, si vemos el vaso medio lleno, tres de cada cuatro alumnos sí tiene la capacidad de encontrar información explícita en un texto corto y sacar deducciones relacionadas.
El examen aplicado por primera vez a 218 mil estudiantes de 7742 establecimientos en todo Chile, arrojó preocupantes cifras respecto a la comprensión lectora de niños que acaban de aprender a leer, por lo que se concluyó que no lo están haciendo adecuadamente.
En cifras, esto quiere decir que 54500 niños y niñas no logran las habilidades y conocimientos mínimos para comprender un texto adecuado para su edad, según las diferentes mediciones que establece la prueba, sobre todo orientada a determinar el nivel de comprensión lectora.
El examen, en general, salió bien evaluado puesto que efectivamente el 75% de los niños y niñas sí lograron demostrar dominio de los textos y deducir ideas de las lecturas. Incluso, un 40% pudo contestar preguntas consideradas "difíciles", en que debían encontrar información explícita en textos más largos y realizar inferencias simples.
Lo negativo es que, para variar, existe una diferencia clara de resultados en los colegios particulares, los subvencionados y los municipales. Estos últimos, como casi siempre, a la cola. La diferencia entre el grupo socioeconómico alto y bajo fue de 53 puntos (282 sobre 229), similar a la diferencia detectada en el Simce de 4° básico (52 puntos), aunque menor a la que se registra en 8° básico, donde la brecha llega a 57 puntos.
Mientras los particulares pagados obtuvieron un promedio de 282 puntos, los particulares subvencionados lograron una media de 253 puntos y los municipales solo obtuvieron 239 puntos. Es decir, existe una brecha de 43 puntos entre los establecimientos municipales y los particulares pagados.
Una de las principales conclusiones de las autoridades es que los altos puntajes provienen de aquellos niños a cuyos padres los incentivaron a más temprana edad a aprender a leer. En definitiva, a medida que los niños comienzan a pronunciar sus primeras palabras, es también una buena edad para comenzar con ejercicios de lectura.
¿Y tú, a qué edad aprendiste a leer tus primeras líneas?