Para muchas mujeres la cuestión de los estilos de cabello se puede volver algo muy complejo, por miedo a que el resultado sea nefasto y por eso terminamos realizando pequeños cambios, casi imperceptibles, sólo por miedo a arriesgarnos. No quiero negar las bondades que nos da el pelo largo, pero aunque muchas lo cuestionen, el pelo corto sí tiene sus beneficios.
Me corté el pelo hace un par de meses. Lo tenía muy largo –y qué decir de las puntas quemadas- por lo que decidí arriesgarme a un cambio drástico bajo el lema “año nuevo, vida nueva”. Al hacerlo me di cuenta lo práctico que era y que agregaba un look mucho más deportivo y casual, el cual personalmente me acomoda mucho.
Analizando mi feliz transformación y bajo otra consigna de Ludwig Mies van der Rohe, “Lees is more”, mencionaremos los beneficios que trae atreverse a llevar un cabello corto:
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Al requerir menos mantenimiento, se necesita de menos tiempo para lavar, secar y sobre todo, peinar un look cómodo a cada ocasión. También podemos usar distintos accesorios que se ajustan fácilmente al tipo de cabello, no perdiendo tantos minutos en lucir deslumbrantes.
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Utilizamos menos productos como champú, tinturas o fijadores, lo que es una gran ayuda a nuestro bolsillo.
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El cabello tiene menos peso, lo que da una sensación de ligereza bastante agradable.
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Al peinar sufrimos de menos -o nulo- dolor. Esto depende mucho del tipo de corte que uno lleve, pero claramente ya no se implora clemencia al mantener un cabello largo que no puede ser peinado cuidadosamente todos los días.
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Las lindas chicas que llevan distintos estilos de cabello corto de acuerdo a su tipo de rostro, sea asimétrico, recto, vaporizado o la clásica melena, reflejan menos edad, luciendo un estilo único y mucho más fresco y atrevido.
Y ustedes, chicas, ¿se atreven a este cambio de look?