Durante los últimos días los estudiantes secundarios han vuelto a hacer noticia con las tomas de sus establecimientos. Múltiples desalojos, “tomas fantasmas” y liceos resguardados por Carabineros se han convertido en escenarios frecuentes. Frente a este panorama, los universitarios han comenzado un proceso de discusión para apoyar a sus compañeros de enseñanza secundaria, y así también revitalizar las movilizaciones. Todas estas situaciones han provocado que se hable de una radicalización del movimiento estudiantil. ¿Es ésta la forma de conseguir las demandas? A continuación, algunos puntos que se pueden considerar para responder esta pregunta:
1. Un medio, no un fin: Las ocupaciones de los colegios han sido criticadas como una forma violenta y radical de exigir las demandas. No obstante, éstas no vienen a realizarse como una medida caprichosa y tampoco se trata de un fin en sí mismo. Las ocupaciones se han realizado ante la falta de voluntad política del Gobierno y las medidas que ha impulsado éste. Se trata de un medio de presión.
Ante las respuestas insatisfactorias gubernamentales, Rayén Araya, de Radio Bío Bío, invita a preguntarse cuál es el camino a seguir y si acaso no es posible cambiar esta realidad. “Cuando usted esté pensando que ya es suficiente, que no queremos ver más micros incendiadas en las calles, que no queremos tener más violencia, recuerde que esto no avanzó de otra manera tampoco el año pasado. Que es por eso que seguimos hablando del tema del lucro en la educación. Que si usted tiene nietos, hijos, sobrinos educándose, esto va en directo beneficio de ellos, a la larga lo que se busca es mejorar la educación para todos. Y si usted además paga los estudios de algunos de estos miembros de su familia, pues entonces además le toca directamente en sus bolsillos”, argumentó Araya.
Por otra parte, las autoridades no se han referido a la violencia utilizada por Fuerzas Especiales para desalojar las tomas. Una de las pocas condenas ha sido de parte de la Defensoría de la región de O'Higgins, debido al actuar de Carabineros durante el desalojo de un liceo en Rancagua. Esto luego de que diez menores detenidos fueran obligados a desnudarse, argumentando que era necesario para registrarlos. Hasta la ONG “Corporación Humanas” también han llegado diversas denuncias.
2. La atención se está desviando: “Hacer creer a Chile que el problema de la Educación son los encapuchados, es tan intelectual como decir que el problema de la pobreza son los pobres.” Esta frase es del twitter de José Ancalao, vocero de la Femae (Federación Mapuche de Estudiantes). Similar opinión tiene el analista argentino Pedro Brieger: “El gobierno del Presidente Piñera está enfocándose en el tema de la violencia. Los estudiantes responden que hay un tema de fondo, el tema de la educación pública, algo que no se resolvió el año pasado”. De esta forma, desviando la atención hacia el tema de la violencia, se descuidan los asuntos fundamentales, es decir, las reivindicaciones estudiantiles. Éstas se pueden encontrar en forma de propuestas en documentos como:
- “Propuesta para la Educación que Queremos” de la ACES (Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios) , la cual fue entregada a principios de mayo al Ministro de Educación.
- “5 Exigencias para Avanzar hacia un Nuevo Sistema Educacional”. Éste último fue realizado en conjunto con la Confech, la Cones (Coordinadora Nacional de Estudiantes Secundarios) y la ACES, y fue entregado el 28 de junio al Ministerio de Educación.
- "Compendio de demandas y propuestas estudiantiles" de la Cones.
3. La decadencia de la educación pública: ante todo este panorama, hay quienes afirman que esta radicalización de las movilizaciones no hace más que destruir la educación pública que el mismo movimiento defiende. Asimismo, se suele afirmar que lo ocurrido durante el 2011 provocó la fuga de muchos estudiantes desde los establecimientos fiscales. Sin embargo, esta tendencia viene desde hace años y no es posible adjudicársela exclusivamente a las movilizaciones. “Las escuelas público-municipales han sufrido una disminución de su matrícula del 61,2% en 1990 al 48% en 2005 a nivel nacional, lo que se ha traducido en una disminución del número total de este tipo de establecimientos de 6.000 en 1990 a 5.572 en 2005”, explica Jaime Portales, a Ciper. Es decir, el sistema actual es precisamente el que ha incentivado el descuido de los colegios públicos. Las tomas y paros apuntan a modificar esta precaria situación de la educación pública. Es un objetivo de largo plazo en pos de un bien común.
4. El 2006, pronunciarse a favor de la educación gratuita se consideraba radical: Hace seis años atrás, se vivieron importantes movilizaciones protagonizadas por estudiantes secundarios. Ese año, dentro de las diferentes posiciones al interior del movimiento, quienes creían en la educación gratuita eran considerados como radicales o “ultra”. “Los “‘pingüinos asistémicos’ creen que la educación debe ser gratis, porque somos todos iguales. Pero, hoy el contexto muestra que eso no es así. Si tú das la PSU gratuita no es el empresario el que se perjudica, sino que el más pobre, porque en vez de poner plata para la prueba, le puedes dar dinero para un hospital” señala César Valenzuela, vocero de la época, en libro “El Mayo de los Pingüinos”. Lejos estaban las discusiones sobre la forma de entregar dicha gratuidad por medio de una reforma tributaria.
5. Las soluciones del gobierno dan la espalda al movimiento y no dialogan con éste: ¿Y qué pasa con las iniciativas legales que se han impulsado? “Aquí se dio un primer paso que estuvo mal, en el sentido de que se redactaron proyectos, se hicieron reformas, pero que ninguna fue considerada en referencia a las demandas estudiantiles. Ninguna fue consultada a los actores que se movilizaron por más de un año por la demanda de la educación pública. Eso nos da a entender que no hay una intención de diálogo, no hay intención de generar espacios de instancias de construcción conjunta para solucionar el conflicto educacional”, afirmó a CNN la vocera de la ACES, Eloísa González.
¿Consideras que una radicalización del movimiento es algo positivo tomando en cuenta el escenario actual? ¿Crees que así se pueden conseguir las demandas?
Radicalización de las movilizaciones: ¿es la forma de conseguir las demandas?
Publicado
por
Agustina