¿Qué estudiaré y dónde?, son, seguramente, dos de las preguntas que más rondan por tu cabeza en el último semestre. Especialmente, si estás tan sólo a unas semanas de rendir la PSU y tomar la decisión que definirá gran parte de tu futuro. Si luego de tanto pensarlo, aún no encuentras las respuestas y estás presionado por la fecha, no te sientas solo; no eres el único.
Una encuesta realizada este mes por el Programa de Estudios Sociales de la Universidad Católica de Valparaíso, que contempló a más de 4 mil escolares de cuarto medio, inscritos para dar la PSU, concluyó que uno de cada cinco aún no tiene claro qué estudiar. Es decir, el 21 por ciento no define todavía sus postulaciones. Las diferencias, eso sí, entre colegios municipales y particulares, son importantes: en los primeros, tan sólo un 32 por ciento tiene la carrera decidida, mientras que en los privados, un 58 por ciento.
Por otro lado, acerca de las preferencias en cuanto a casas de estudios, la mayoría de los jóvenes siguen teniendo mayores expectativas frente a las universidades estatales; el 68 por ciento las prefiere, versus un 13 por ciento que desea ingresar como primera opción a una institución privada.
Además, las carreras predilectas de los escolares se presentan bien marcadas, ya que un 40% mencionó, dentro de sus primeras opciones: Medicina, Ingeniería Civil Comercial e Industrial y Derecho. Dentro de estas mismas preferencias, más de la mitad aspira a cursarla en la Universidad Católica o la Universidad de Chile. El tercer (y bastante más atrás), lo comparten la la U. Católica de Valparaíso y la U. Adolfo Ibáñez.
De todos modos, es bastante lógico que la inseguridad sea uno de los sentimientos imperantes entre todos aquellos jóvenes que están a punto de rendir la PSU. La presión aglomerada en un sólo año, muchas veces, entorpece una decisión que debería ser tomada en otro tipo de contextos.
Siempre he sido partidaria de que la elección de la carrera debería efectuarse, una vez dentro de la institución. Algo así como el proceso vivido en Estados Unidos, en donde, una vez dentro y habiendo tomado la diversidad de cursos que los alumnos elijan, recién se toma una decisión. Además, no sólo basta un puntaje, sino que, también, una serie de aptitudes que debe demostrar el adolescente para ser aceptado en la opción que desea.
Y tú ¿Qué opinas? ¿Al salir de cuarto estás realmente preparado para saber que estudiar? ¿Sabes ya cuál es tu futura carrera?
Un alto porcentaje rendirá PSU sin saber qué estudiar, ¿Y tú?
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